Capítulo 9.

Siete en punto de la mañana, de un lunes soleado, un nuevo día y una nueva vida.

Llaman a la puerta de mi habitación.  Es mi hermano mayor:

<Hola hermanita>

<Hola chache> Siento la necesidad de contarle lo de mi embarazo pero no estoy segura.

<Me has abandonado durante dos días, asíque me tendrás que contar muchas cosas ¿no?> Asiento con la cabeza, cabizbaja.

Nos tumbamos en la cama y decido ir al grano sobre mi embarazo.

< Mira chache, voy a ir al grano.> Mi hermano me mira con preocupación.  <Estoy embarazada... de Dani> Mi hermano se levanta sobresaltado.

< ¿Cómo?, Pero... ¿tu no sabes para que sirven los condones o qué?  No me esperaba esto de ti, María>

<Venga húndeme más en la mierda, Javier> le digo enfadada.

<Lo siento, pero es que... no me esperaba ser tío tan pronto> Me dice con tristeza.

< ¿Y que te crees que yo me esperaba ser madre tan prematuramente?>

< ¿Y tus amigas que han dicho?>

<Pues nada porque ellas también lo están>

<Ósea que habéis hecho un pacto ¿no?>

<No pero me has dado una muy buena idea> le digo sonriente.

<Bueno pues nada que soy tío con tan solo 18 años.  Espero que salga a mi y no como el feo de su padre> Dice riéndose.  Mi hermano la verdad es que es bastante guapo, rubio con los ojos azules y alto.

<No te metas con su padre... ¡FEO!> y nos ponemos a jugar aunque ahora me doy cuenta de que ya nada va a ser igual...  Dentro de nueve meses seré madre.

Me visto y me peino con mi hermano y vamos a despertar al pequeño de la casa. Se llama Adrián.  Tiene dos años y medio ya que el veintitrés de abril cumplirá los tres.  Es moreno y con los ojos verdosos, igual que yo.

<Ey pequeñazo, levante que son ya las ocho>

<No> responde con su vocecita.

<Venga levántate, Adrián.  ¿O quieres que llame al chache y te hago muchas cosquillas?> Y rápidamente se levanta.

Me coge de la mano y bajamos abajo.

Hoy mis padres no están a la hora del desayuno asíque he quedado con Laura y Paula para desayunar.

*DING DONG*

Ahí están tan puntuales.

< ¡Hola Mery!> Dicen al uníson.

<Hola amores>

Nos ponemos a desayunar y les cuento mi idea, bueno la idea que me ha surgido hablando con mi hermano.

<Chicas, he pensado en llamar a nuestros embarazos:  ‘El Pacto’.  ¿Qué os parece?>

Les parece buena idea asíque será nuestro pacto:  ‘Si una cae, las demás caemos’.

Recogemos y nos vamos al instituto.  Por el camino nos encontramos con Dani y Pablo y nos vamos con ellos a esperar a Pedro, Raúl y Sonia.

Cuando llegamos a la parada, Dani me coge y me lleva a un banco y me dice:

<Te tengo que dar una mala noticia...  Carlos se ha ido a vivir a otro lado.  Me ha pedido que te lo dijese yo porque el no podía ya que lo pasaríais los dos fatal.>

< ¿Qué?> digo sollozando <Es imposible, Dani.  ¿Estas seguro?> Dani asiente con la cabeza y derepente me encuentro un poco mareada y me desmayo.

Capítulo 8.

<Paula, Paula, Paula> Grito a todo pulmón.  Tras habernos contado lo que pasó anoche con Pablo, se desmaya. Nos tememos lo peor.  Rápidamente llamamos a los chicos y Pablo se alerta mucho.

Decido pedirles que la suban a su habitación.

Nos quedamos solas, encerradas en la habitación y comenzamos a intentar despertarla:

<Paula, por favor, despierta> dice Laura con apenas unas lágrimas en los ojos.

Por fin abre sus preciosos ojos y pregunta que ha pasado.  Le contamos todo lo que ha pasado y entonces se nos ocurre una posibilidad... puede estar embarazada.  Lo digo en algo alto y entonces la cara de Laura palidece.  Ella también puede estarlo.

<Pablo y tú... ¿Usasteis protección?> digo ruborizada.

<Pues no me acuerdo María...> dice con lágrimas en los ojos.

< ¿Y tu Laura?> Me mira y me niega con la cabeza.

Nos abrazamos y derepente me acuerdo de que posiblemente yo tampoco lo usé.

A continuación entra Pablo y Laura y yo salimos de la habitación.

Bajamos abajo y hablo con Dani sobre el tema de si lo usamos o no.

Me dice que no se acuerda y yo me pongo muy nerviosa.  Tengo casi dieciséis años, soy muy joven para tener hijos.

<Dani... creo que estoy embarazada...> Dani palidece y me abraza.

<Estés embarazada o no...  Yo estaré aquí apoyándote en todo> Me enorgullezco de Dani, es un gran chico, por eso le quiero tanto.

Laura va en busca de Pedro para comunicarle su embarazo.

A la hora de la comida nos reunimos todos.  Las Pequeñas Locas nos sentamos juntos, falta Sonia pero se lo diremos cuanto antes.

Como no estábamos totalmente seguras de nuestro embarazo, fuimos a comprar un teste de embarazo.

<Bueno chicos> empiezo yo <Nos hemos hecho unos tests de embarazo y ha salido...> vacilo un poco pero Laura se me adelanta:

< ¡Estamos embarazadas!> Suelta sin ninguna preocupación.

Dani me ha dicho que me ayudara a decírselo a mis padres pero aun así temo su reacción.

Los niños nacerán seguramente el mes del cumpleaños de Laura y el mío.

Llamamos a Sonia y se lo contamos, ella es la única Pequeña Loca que no esta embarazada, tengo que reconocer que estaría bien que ella también lo estuviera pero no queremos que su adolescencia sea igual que la nuestra.

<Eh, chicas, después de lo que os ha pasado, he tomado una decisión> Nos dice Sonia <Yo también me voy a quedar embarazada, si tengo un hijo, David y yo nos uniremos más>

< ¡NO HAGAS TONTERIAS!> Decimos las tres al unisón.

<Que si chicas, somos un grupo y si una cae, caemos las demás> Hace una pausa <Y si una se queda embarazada las demás también>

No vamos a poder hacer cambiar de opinión a Sonia, es la persona más cabezona del mundo al igual que Paula, asíque, no insistimos más.

A las 19.45 me voy a mi casa, estoy muy cansada y lo del embarazo me agota aún más.

Me doy una ducha rápida y me acuesto.

Mañana será otro día...

Capítulo 7.

Termina la película.  Me alegro de a ver tenido a Dani a mi lado.  Sus besos y caricias me tranquilizaban en las escenas de miedo.

Laura, Pedro, Dani y yo nos ponemos hablar pero me doy cuenta de que faltan... ¡Paula y Pablo!

<Laura ven a la cocina, por favor> La digo con una sonrisa preocupante.

Confío en Pablo y sé que no la hará nada, pero aun así... me preocupo por mi pequeña.

<Dime, ¿Qué pasa María?>

<Tía ¿Dónde está Paula?>

<Se ha subido arriba con Pablo.  Creo que hoy es su día... igual que tú.> No entiendo como Laura no puede estar preocupada.  Intento relajarme y pensar en que no la pasara nada malo.

<Oye, Laura, y tú... ¿Para cuándo?> la digo con una sonrisa pícara.

<Pues yo... había pensado... que podría ser hoy.> Me dice ruborizada.

<Pues ya sabes... ¡A por él!> A continuación me suena el móvil que interrumpe la conversación con Laura.  Es Sonia.

< ¡Tía, tía, tía!  ¡Qué David me ha pedido salir!  Estoy contentísima...  No me lo creo.  ¡Guauuuuu!> Me dice Sonia eufórica.

Yo la cuento todo lo que esta pasando, mientras que voy hasta el salón. Cuando llego veo a Dani solo y le pregunto que donde están los demás.

<Se han subido arriba>Me dice.  Automáticamente pienso porque se han subido y se lo digo a Sonia.  Después de 15 minutos, Sonia y yo nos despedimos.

Por fin puedo estar a solas con Dani.

Más o menos son las cuatro y media de la madrugada y nos vamos a dormir.

Dormimos hasta las doce de la mañana siguiente.  Bajamos y nos encontramos a los cuatro tortolitos desayunando.

Hoy mis pequeñas me van a tener que contar muchas cosas.

Capítulo 6.

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Laura y yo vamos camino de casa de Paula.  Cuando llegamos nos recibe con una amplia y perfecta sonrisa.  Dice que odia su sonrisa pero a mi me encanta, es perfecta, como ella. Nos preparamos la cena y me acuerdo de que Paula nos tiene que contar algo.

Cuando terminamos nos ponemos a ver la tele pero le digo a Laura lo de que Paula nos tiene que contar algo.

<Paula, ¿No nos tienes que contar algo?> Paula se empieza a reír.  Algo ha tenido que pasar...

<Pues no ha pasado nada, hemos quedado mañana para hablar y esta noche hablaremos y tal> Nos dice sonriente.

Nosotras creemos que ha pasado algo más que una simple conversación y entonces la empezamos a torturar con cosquillas pero ella sigue admitiendo que no ha pasado nada.

Ponemos la tele y empezamos a ver una serie de risa.  En la publicidad, Laura y Paula, llaman a sus dos chicos, y yo con Sonia ya que no quiero despertar a Dani.

Sonia me cuenta lo que ha pasado con David.  Hoy iba a hablar con él y declararle sus sentimientos.

<María, se lo he dicho y no se lo ha tomado mal, me ha sonreído y nos hemos liado y luego me he ido a mi casa feliz pero me he puesto a pensar y yo creo que ha sido un poco pronto porque antes de ayer rompió con su novia y esta muy reciente.> Tiene razón pero si a lo mejor se hubiera esperado, hubieran vuelto u otra se la habría adelantado.

<Sonia, no te rayes y ponle las cosas claras.  No te conformes con un simple lío y pídele más.  Bueno te dejo, mañana seguimos hablando.  ¡Te quierooooo!> y cuelgo.

Pensamos en poner una película.  Finalmente ponemos ‘Hipnos’ ¡Nos encanta!

De repente llaman a la puerta y voy abrir.  Y me encuentro con una grandísima sorpresa... ¡Han venido Dani, Pablo y Pedro!

Una buena noche nos espera a las tres.

Capítulo 5.

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‘’Te quiero’’.  Esa palabra retumba por mi cabeza.

<Yo también te quiero, no lo olvides nunca> le contesto.

No hay ninguna palabra más, solo besos y abrazos.  Sus labios y los míos se funden.  Su piel contra la mía.  ¿Mi primera vez?...  Yo creo que sí y con él.  La felicidad me invade.  Poco a poco va subiendo sus manos desde mi cintura hasta la raya del sujetador. Busca el enganche y lo desabrocha.  Nuestros cuerpos van subiendo de temperatura.  Le quito el botón del pantalón y me deshago de ellos.  Ya llego el momento, los dos gemimos de placer.

No me lo creo. ¡Mi primera vez! ¡Es imposible!

Estamos exhaustos, cuando...  Suena la melodía de su móvil.  Es Paula.

<Dani, ¿Dónde estás?  ¿Sabes algo de María?  ¿Vas a venir a ver a Pablo?>

Lo habría olvidado por completo lo del partido...

<Paula, María está aquí conmigo y ya nos íbamos para ya, así que, tranquila>.  La verdad es que Paula está un poquito insoportable con Pablo pero, así es el amor.

<Ok, no tardéis mucho ¿va?  Un besito Daniel> y cuelga.

Dani me besa y termina de vestirse.  Recogemos un poco y nos vamos.

Llegamos y nos reunimos con los demás.  Llego de la mano de Dani  y causa un poco de revuelo entre los demás. Me cogen Laura, Paula y Sonia y me dicen:

<Ya nos estas explicando que ha pasado> Dicen entre risas.

<Luego, no os preocupéis chicas> Digo y nos empezamos a reír.

Pasa Pablo a nuestro lado y Paula se dirige hacia él.

<Oye Pablo, ¿Cuándo termines de jugar... podemos hablar?> Le dice nerviosísima.  Pablo asiente, sonríe y se va.

Nos sentamos en las gradas y vemos el partido.  Pablo mete un gol y sorprendentemente se lo dedica a Paula.  Casi se nos muere la pobre.

Mientras, Dani y yo, nos besamos, abrazamos y nos acariciamos.  Pero me una duda se aloja en mi mente:

<Dani, después de lo que ha pasado... ¿Qué somos ahora?>

Me sonríe, me besa y me dice:

<Pues, ¿Quieres salir conmigo?> Yo asiento, sonrío y nos volvemos a besar.

Al fin le puedo tener para siempre conmigo.  Tengo ganas de gritar de alegría, son muchas emociones en un día pero, está euforia la saco besándole pasionalmente.

Termina el partido y por desgracia Dani se tiene que ir, mañana tiene partido y tendrá que madrugar muchísimo.  No le veré en todo el día pero el domingo le tendremos para los dos solos, será nuestro día.

Les cuento a mis tres pequeñas y no se lo pueden creer, pero es la realidad, no es un sueño y si lo es no quiero despertar nunca.

Paula se dirige a los vestuarios a hablar con Pablo.  Está nerviosa pero seguro que le sale todo bien.  Mientras, Laura se despide de Pedro.  Me recuerdan a Dani y a mí.  Llevan dos meses y hacen una pareja perfecta. Luego nos despedimos de Raúl y finalmente de Sonia. Esta deseando llegar a su casa para hablar con su querido David.

Carlos, mi má nos acompaña a nuestras casas y después se va a la suya.

Me preparo las cosas para irme a casa de Paula, las Pequeñas Locas (Sonia desgraciadamente no podrá venir) y sus noches de locuras.

Capítulo 4.

’ ¿Qué?  ¿Ha dicho de verdad lo que he oído?  No yo creo que no...  o si... ¡Que lío!  ¡Es imposible que lo haya dicho...!’’ pienso.

<Pues no, no me he parado a pensarlo, simplemente porque yo no soy>.  Digo seriamente.

<Pues te equivocas, princesa.> Me dice sonriente.

No puede ser...  Es imposible...  Me levanto y me voy a lavar la cara.  Miro el móvil y veo que es última hora.  Decido irme a clase y olvidarme de todo lo ocurrido.

Como todavía tengo los ojos rojos e hinchados, me inventare alguna escusa para que no me regañen mucho por haber faltado esas dos horas.

Cuando entro a clase no hay ningún profesor.  La clase está alborotada, muy alborotada.  Esquivo las bolas de papel y me dirijo a mi sitio.  Raúl esta en mi sitio y me dice que Laura ha ido al baño, le digo que se quite y me tumbo en la mesa apoyándome en los brazos.  Intento dormirme pero Raúl no me deja con sus impertinentes preguntas.  Levanto la cabeza y le fulmino con la mirada.

Veo que Laura ya viene del baño y caigo a sus brazos llorando.  Le cuento todo lo que ha pasado y de repente veo en el umbral de la puerta a Dani.  No quiero verle, me ha hecho mucho de sufrir este día y estoy molesta con él.  Para colmo Raúl y él están delante de nosotras así que le tendré que ver en lo que queda de hora.

Por una vez en mi vida no quiero que termine la clase, tampoco quiero que llegue esta tarde.

Raúl nos manda una nota a Laura y a mí diciéndonos que ha pensado que ahora nos podríamos ir a comer algún sitio.  Laura acepta y me obliga a aceptar a mi también.  Los demás también aceptan así que iremos a comer.

Cuando llega la hora de salir, vamos directos al lugar donde iremos a comer.

Empiezo a sentirme mal así que me salgo fuera a tomar el aire.  Me pongo a pensar sobre todo lo ocurrido y me empiezo a rayar, entonces veo a Dani que sale con un vaso de agua, se sienta a mi lado y me da el vaso, yo le doy las gracias y él me sonríe pero se que no es una sonrisa sincera. Necesito irme a casa y él decide acompañarme, temo que me pase algo antes de llegar.

Cuando llegamos le digo que pase y esté un rato conmigo.  Él acepta y pasamos.  No hay nadie en mi casa así que tendremos mas intimidad y podremos hablar mas tranquilamente.

Me voy a dar una ducha para ver si me relajo.

Tardo una media hora, me visto y me peino.  Cuando salgo recibo un mensaje de Laura diciéndome que a las siete este en el campo de fútbol, para ver a Pablo jugar.

Son todavía las cuatro así que le pregunto a Dani que si quiere ver una película, a él le parece buena idea y la vemos.

Antes de ponerla, preparamos unas palomitas y algo de beber, junto a una mantita. Es el plan perfecto para pasarlo juntos.

Mientras vemos la película, nuestras miradas se encuentran varias veces y en un momento, casi al final de la película Dani la para.  Me quedo asombrada, no se porque la ha parado.

< ¿Qué haces Dani?>

<Tenemos que hablar sobre lo de esta mañana>

<Pues empieza hablar> Digo impaciente.

<Antes de nada...  Que te quiero>

Capítulo 3.

Llaman a la puerta pero no voy a abrir.  Tampoco me importa quien hay detrás de ella.  Me miro en mi mini-espejo y compruebo que tengo los ojos rojos e hinchados.  No puedo parar de llorar.  Se que Dani no tiene la culpa de eso, pero si tiene la culpa de haberme echo pensar en cosas que podían haber pasado entre él y yo.  Veo que debajo de la puerta asoman unos pues.  Me harto de tener a alguien detrás de la puerta escuchando como lloro y abro bruscamente la puerta. Me encuentro con Dani que entra rápidamente y la vuelve a cerrar.

< ¿Qué te pasa princesa?> Y me sonríe.

<No me llames princesa y déjame salir> Y de repente me abraza.

< ¡Pero ¿Qué pasa, no lo entiendes o qué?  ¡Déjame salir y no me hables!> Me doy cuenta de que le estoy chillando y veo como me mira con tristeza.

<No me gusta verte así> Me dice.  <Mira yo también estoy mal y si te sirve de consuelo te contare lo mío que probablemente es peor>

Me espero lo peor, pero me apetece escucharle.

<Estoy saliendo con una chica desde hace ocho meses> palidezco rápidamente.  <Se que no sabíais nada, pero si no os lo he contado ha sido porque no quiero a esta chica, quiero a otra>Acabo de fallecer moralmente.  Ya no me queda nada, ni siquiera la ilusión de poder estar con él algún día.  <Yo creo que esta chica no va a querer nada conmigo pero tampoco he luchado mucho para saberlo.  Seguro que ella quiere a otro y no se va a quedar conmigo.  Estoy echo una mierda.>

Las palabras de Dani me emocionan, sé que no soy yo, por eso quiero saber quién es y ayudarlo.

< ¿Y quién es esa chica?> Digo, pero suena el timbre.

Se levanta para irse a clase pero ve que yo sigo sentada en el mismo lugar y me dice:

<Levanta que tenemos que ir a clase> Y me tiende la mano para ayudarme a levantar.  Yo le niego con la cabeza y saco la BB.

Empiezo a escribir un mensaje a Dani:

‘’Vete tú y déjame sola, no me apetece estar con nadie y tampoco hablar.  ’’

Lo lee, me mira y me responde:

‘’No pienso dejarte sola.  No te librarás de mí tan fácilmente.  Si no quieres hablar, no hablamos, solo dormimos o nos miramos o nos besamos.  ’’

Pero si no me quiere... ¿por que me utiliza?  ¿Para olvidarse de la otra o qué?

No me gusta la idea de quedarme con él pero no puedo hacer nada para que se vaya.

Le respondo con un:  ‘’Haz lo que quieras’’

Pongo música y me pongo los auriculares.  Él me pido uno y se lo doy.  De repente me quita el móvil y crea una nueva lista para añadir nuestras canciones de amor favoritas.

Me levanto y me voy a beber agua.  Cuando vuelvo me pide que me siente entre sus piernas.Yo lo hago y me echa la cabeza hacia atrás, me mira a los ojos, me sonríe con su perfecta sonrisa y me besa.  Un beso largo... con pasión.  Su lengua y la mía juegan mientras que él me mete las manos por debajo de la camiseta.  Cuando nuestros labios se apartan, sus manos siguen pegadas a mi cuerpo. Me empieza a besar el cuello y yo me estremezco de placer.

De repente le suena el móvil, alguien lo llama.  Leo que pone Patricia...  y él dice <Joder...>.  Yo le pregunto quién es y me responde <Es mi novia>.

Me pongo nerviosa, había olvidado completamente que tenía novia.

Descuelga y pone el altavoz.

<Hola bebe.  ¿Qué tal?> Dice la chica.

<Hola.  Bien ¿y tú?>Responde él fríamente.

< ¿Qué te pasa amor mío?>

< ¿A mi?  Nada ¿y a ti?>

<Te ha ido mal el día cariño... ¿Qué te ha pasado?  A ver cuéntame.>

Yo no daba crédito a lo que oía...  Esa chica estaba tonta.  ¿No se daba cuenta de cómo le estaba hablando Dani?

<Mira Patricia, no quiero estar contigo, quiera otra chica y esa otra no eres tú... asíque... hemos terminado.> La dice duramente y cuelga.

¿Qué?  Estoy anonadada ahora mismo...  No me lo creo.

Cuando volví a la realidad, me doy cuenta de que Dani había vuelto a meter sus manos y las tenia en una zona de mucho peligro.  Me siguió besando por el cuello y cada vez iba subiendo más sus manos. Le paré y le quite las manos.

<Dani, yo creo que me estás utilizando...> Me mira con cara de rareza y me dice:

< ¿Por qué crees eso?>

<Pues porque a ti te gusta otra y no entiendo porque me besas así, si no soy yo.> Me mira, sonrie y me responde:

<¿No te has parado a pensar que a lo mejor esa otra eres tú...?>